VALLE DEL ITATA
El Valle del Itata está ubicado en la región de Ñuble. Esta zona vitivinícola, con denominación de origen homónima, es la más grande del sur de Chile y la más antigua. El valle marca el espacio de transición entre el norte templado y
el sur lluvioso. Abarca una cuenca extensa, rodeada por un gran número de ríos.
Entre ellos, el que da nombre al valle, el río Itata. Éste se origina en Confluencia, lugar donde confluyen el río Ñuble y el Diguillín. La historia del vino del Valle del Itata nació a los pies de estos tres ríos, con los primeros encomenderos, quienes llegaron a estas tierras hace más de 5 siglos.
500 AÑOS DE HISTORIA
EN 6 TIEMPOS
Con esta batalla, entre españoles y araucanos, que tuvo lugar entre Confluencia y los cerros Cucha Cucha, se da inicio a la epopeya de Arauco y a la historia del Valle del Itata.
Desde la época de la colonia hasta la independencia de Chile, el valle fue escenario de una serie de eventos claves en la historia de nuestro país.
La Araucana : poema / de D. Alonso de Ercilla y Zúñiga. Ed. ilustrada. Madrid : Impr. y Libr. de J. Gaspar Editor, 1884. 168 p.
En los primeros años de la colonia, la falta de vino era algo que se hacía notar, por tratarse sobre todo de una sociedad muy arraigada a las tradiciones latinas y cristianas, donde el vino forma parte fundamental de los rituales.
Francisco de Carabantes, un clérigo español, introdujo las primeras cepas de vino País
(o Listán Prieto) y Moscatel de Alejandría en el año 1548. Los estudios han demostrado que las actuales vides del Itata son descendientes directas de estas primeras plantas.
VALLE DEL ITATA
Tras la introducción de la vid, empiezan los esfuerzos por cultivarla. Un punto de inflexión en el desarrollo de la vitivinicultura, fueron las contribuciones de la orden Compañía de Jesús,
que llegó al país en 1563.
Esta orden fundó varios colegios, los cuales administraban haciendas. Éstos introdujeron nuevas maquinarias, equipamiento y técnicas, llegando a ser grandes empresarios
vitivinícolas. El colegio de La Concepción, llegó a poseer 7 haciendas en la región del Itata, entre ellas, la histórica hacienda Cucha Cucha.
Tomas Lopez compuesto por el mapa manuscrito de Poncho Chileno, Madrid 1777
Poco después de introducidas las primeras vides, el vino producido en el valle comienza a ganar fama a lo largo de todo el reino de Chile, llegando a conocerse como el “Vino de Chile“. El vino pipeño, criado en cubas o pipas de raulí, es sinónimo de vino puro y de excelencia.
Hacia 1870 el Valle del Itata abarca el 80% de la producción nacional.
Bodega viña La Rosa. Peumo, 1968.| ARQ (Santiago) n.54 Santiago jul. 2003
Los vinos de estilo francés, introducidos a Chile a partir de 1850, comienzan a posicionarse por sobre los vinos del Itata.
Hacia 1920, la producción vitivinícola de los valle centrales, supera la producción del Valle del Itata. Se suman a esto, problemas de sobreproducción, hambruna y fuertes problemas de alcoholismo. Como consecuencia, a principios de los años 60, el valle se ve sumido en un largo decaimiento económico que durará hasta mediados de la primera década del 2000.
Las cepas ancestrales comienzan a quedar en el olvido y el pipeño deja de ser sinónimo de calidad.
Bodega viña La Rosa. Peumo, 1968.| ARQ (Santiago) n.54 Santiago jul. 2003
Tras un largo letargo, el valle y sus vitivinicultores han logrado despertar y reconectarse con sus orígenes.
Existe una gran voluntad colectiva de
rescatar las cepas patrimoniales, su historia y tradiciones de este valle.
Los esfuerzos están puestos en visibilizar el patrimonio de la vitivinicultura del Valle del Itata, salvaguardándolo del deterioro y olvido.
Se trata de volver a contar una historia pocas veces oída, pero que dio origen al verdadero vino de Chile.
Viña Prado año 2020